¿Qué es la depresión?
La depresión es un trastorno emocional en el que la persona que lo padece tiene un sentimiento de tristeza constante y profundo que produce que pierda interés en sus actividades diarias.
La depresión puede ser endógena o reactiva. Cuando es endógena la persona no sabe identificar un motivo o evento que la haya desencadenado. En cambio, en la depresión reactiva se puede conocer la causa que ha activado el problema. En ambos casos, es frecuente que se describa como un punto de “no retorno”, es decir, que la persona sienta que hay “un antes y un después”.
El afectado/a siente que no puede hacer nada más que renunciarse o rendirse.
Síntomas de la depresión
Los síntomas de la depresión abarcan:
- Incapacidad para sentir placer pérdida de interés y renuncia de las actividades cotidianas
- Pérdida de energía, cansancio
- Lloro frecuente, sentimientos de tristeza
- Sentimientos de incapacidad y desesperanza
- Irritabilidad
- Rumiación constante
- Alteraciones del sueño
- Alteraciones de peso (falta de apetito o por el contrario, atracones)
- Sentimientos de culpa
- Dificultad para concentrarse y tomar decisiones
- Pesimismo
- Síntomas físicos (dolor de espalda, de cabeza, cervical)
- Pensamientos suicidas o pensamientos frecuentes acerca de la muerte
¿Cuándo debo consultar a un psicólogo?
Es normal sentirnos tristes en momentos puntuales de nuestra vida, así como antes situaciones que nos superan puntualmente. El problema surge cuando la tristeza se prolonga en el tiempo. Empezamos a perder nuestra vitalidad, el interés por nuestras tareas y hobbies, por nuestras relaciones, y sentimos que no podemos hacer nada por cambiarlo. Estos deben ser indicios que nos empujen a consultar para poder mejorar.
¿Cómo trabajamos el tratamiento para la depresión?
Hay personas que nunca tratan su depresión y esta se cronifica en el tiempo. Es un problema grave porque incapacita a las personas para afrontar su día a día. Algunas personas se sienten condenadas a vivir así para siempre.
Estamos ante un trastorno frecuente (según la OMS, en la actualidad es la principal causa de discapacidad en todo el mundo). Y es importante saber que la depresión tiene tratamiento y que la gran mayoría mejoran, incluso aquellos casos que llevan mucho tiempo padeciendo el trastorno.
Desde nuestra consulta en Barcelona estudiamos cada caso en concreto, pues a pesar de tener síntomas comunes, cada persona y cada problemática son únicos. Una vez estudiado el caso, empezamos a dar una serie de instrucciones a la persona para que pueda ir afrontando su problema, de manera que cada vez más empieza a tener herramientas para salir del estado de tristeza y apatía en el que se encuentra. La terapia breve estratégica ha demostrado ser muy eficaz en el tratamiento de la depresión.
Diferencias entre depresión y tristeza
Una de las confusiones más comunes en la salud mental es la diferencia entre tristeza y depresión. Aunque estos términos a menudo se usan de manera intercambiable en el lenguaje cotidiano, representan dos experiencias emocionales distintas.
La tristeza es una reacción normal y saludable a los desafíos de la vida, como la pérdida de un ser querido, una ruptura o la pérdida de un trabajo. Todos experimentamos tristeza en diferentes momentos, y aunque puede ser intensa, generalmente es temporal y se alivia con el tiempo.
La depresión, por otro lado, es un trastorno del estado de ánimo que implica una tristeza persistente, una pérdida de interés en las actividades habituales, y una variedad de síntomas físicos y cognitivos. A diferencia de la tristeza, la depresión puede durar semanas, meses o incluso años, y puede interferir significativamente con la capacidad de una persona para funcionar en su vida diaria.
Impacto de la depresión en la calidad de vida
La depresión tiene un impacto significativo en la calidad de vida de una persona. Puede afectar a distintas facetas de la vida, desde las relaciones personales hasta el rendimiento laboral, y puede aumentar el riesgo de una serie de problemas de salud física, incluyendo enfermedades del corazón y la diabetes. Además, la depresión puede llevar al aislamiento social y emocional, agravando aún más los sentimientos de desesperanza y desánimo.
Depresión postparto
La depresión postparto es un trastorno del estado de ánimo que puede afectar a las mujeres después del parto. Los síntomas pueden incluir tristeza abrumadora, agotamiento, y una sensación de desconexión con el bebé, entre otros. Es importante recordar que la depresión postparto es una complicación del parto, no una debilidad o una falla. El tratamiento, que puede incluir terapia, medicación, y apoyo, puede ser muy efectivo.
Depresión en adolescentes
A veces resulta difícil reconocer la depresión en los adolescentes. Pues la adolescencia es una etapa en que los cambios de humor y la inestabilidad emocional están a la orden del día. Si hay algo que te llame especialmente la atención, como por ejemplo que no tienes ganas de salir de la cama, que nada te motiva, que estas especialmente triste por algo que te cuesta gestionar, o simplemente que sientes que algo no va bien, es importante que puedas buscar la ayuda de un profesional para que te guie y te ayude a gestionar la situación.
Depresión en personas mayores
La depresión en la tercera edad a menudo se pasa por alto o se malinterpreta como una parte normal del envejecimiento o una reacción a las enfermedades crónicas, la pérdida de seres queridos, o los cambios en las circunstancias de la vida. Sin embargo, la tristeza que persiste en el tiempo, y se convierte en depresión nunca hay que normalizarla, ni siquiera como parte del envejecimiento. Las personas mayores merecen recibir atención y tratamiento para la depresión para mejorar su calidad de vida.
Aunque los adultos mayores pueden experimentar muchos de los mismos síntomas de depresión que las personas más jóvenes, podemos ver ciertas diferencias en cómo se manifiestan. Por ejemplo, pueden estar menos dispuestos a hablar de sus sentimientos de tristeza o desesperanza y en lugar de ello pueden quejarse de dolores y molestias físicas, o parecer más irritables y enfadados.
Es esencial fijarnos en el bienestar de nuestros mayores. Con el tratamiento adecuado, que puede incluir terapia, medicación, y cambios en el estilo de vida, los adultos mayores pueden superar eficazmente la depresión y mejorar su bienestar general.
En resumen, la depresión es un trastorno de salud mental serio que puede afectar a personas de todas las edades y etapas de la vida. Aunque puede ser devastadora, la depresión también es tratable. Si tú o alguien que conoces está luchando contra la depresión, es importante buscar ayuda de un profesional.